Condiciones de la Mixteca del Estado de Puebla
La región indígena conocida como la Mixteca Poblana está claramente marginada y empobrecida. Esta región localizada en Puebla, México, tiene una marcada temporada de lluvias. Sin embargo, el 15% del territorio requiere de irrigación. Debido a la poca disponibilidad de agua, las actividades agrícolas están limitadas.
La escasez de agua se recrudece cada año pues el ritmo de erosión aumenta, disminuyendo la permeabilidad del suelo. Como consecuencia, ni siquiera las cosechas de alimento básico como frijol y maíz están aseguradas.
Suelos Difíciles
Otro problema importante es el fuerte viento que desplaza la humedad apenas comienzan las lluvias. Lo que es peor, los suelos de la región son duros y de baja calidad, comprometiendo la retención del agua.
La sequía castiga la escasa ganadería, causando problemas para mantener la producción de forraje. En resumen, las comunidades en la Mixteca tienen dificultades para satisfacer sus necesidades de agua y alimento.
Aridez de la Mixteca
Montealegre en la Mixteca Poblana
Montealegre llegó a la comunidad de San Manuel La Parota en 2013, enseñando a los pobladores como utilizar TECNOLOGÍAS SUSTENTABLES. Las prioridades fueron: usar el agua de forma apropiada, crear suelo, recargar acuíferos y mejorar la nutrición infantil. Estos objetivos se habrían de derivar directamente del cultivo del ÁRBOL DE LA MORINGA.
Con las primeras lluvias las raíces de la moringa rompieron el suelo y la roca. De esta manera se activaron los microorganismos que permitieron la aparición de vegetación y animales. Al mismo tiempo, la población local participó en el desarrollo de la infraestructura, como las represas.
Ésto nos llevó a apoyar la economía de la comunidad y a compartir la cosecha con los locales. Es así como padres y madres mixtecas comenzaron a suplementar la dieta de sus hijos con hoja de moringa.
Cuadrilla de Montealegre supervisando la integración de los cultivos con el entorno natural
La Promesa Montealegre
Montealegre ofrece oportunidades de desarrollo económico en comunidades apartadas de la producción industrial centralizada. En esos territorios olvidados, áridos y estériles, la supervivencia humana se vuelve difícil.
Ahí, las cosechas tradicionales no prosperan ni dan esperanza de autonomía a quienes las trabajan. Sin embargo, el árbol de la moringa puede prosperar en esas condiciones, y con esto los trabajadores y sus familias. Ésta es la promesa Montealegre.
“La moringa que actualmente ofrece espada y escudo a las comunidades marginadas, llega ahora al consumidor citadino. Montealegre entiende el interés de la sociedad moderna en una suplementación natural de calidad.
Montealegre conjuga distintos contextos sociales y económicos por medio de la oferta de la hoja de moringa. Un árbol que no discrimina a quién beneficia. Se trata de una herramienta de la naturaleza regalada al ser humano.”
-Equipo Montealege